11 de Julio 2011. Únete al cambio.

Mucho tiempo hacia que no me pasaba a escribir por aquí, y no por falta de ganas, si no de tiempo y problemas que se han ido cruzando por el camino. Pero ya estoy de nuevo aquí, al menos, por un tiempo.

No son pocas las noticias que han sucedido desde el último post que escribí, evidentemente, imposible citarlas todas. Solo sé, que mi frustración, mi indignación y mi impotencia siguen igual o más fuertes que antes.

Hace poco me puse a remirar películas que antiguamente me llamaron la atención y, sin duda, han despertado en mi algo que me gustaría compartir con todos, algo que me encantaría que se hiciera realidad, que se llevara a cabo (evidentemente soñar es gratis, al menos, de momento). No citaré textualmente pues he hecho pequeñas modificaciones para que sea acorde a nuestra realidad, pero evidentemente os sonará o, por lo menos, podréis encontrarlo sin dificultad.

«¡Buenas tardes, Mundo!

Permitid que, primero, me disculpe por la interrupción. Yo, como mucho de vosotros, aprecio la comodidad de la rutina diaria, la seguridad de lo familiar, la tranquilidad de la monotonía…

A mí, me gusta tanto como a vosotros, pero con el espíritu de conmemorar los importantes acontecimientos del pasado (normalmente asociados con la muerte de alguien o el fin de alguna terrible y sangrienta batalla… y que se celebran con una fiesta nacional)  he pensado que podríamos celebrar el próximo 11 de Julio del 2011 (un día que, lamentablemente, tiene otro significado) tomándonos 5 minutos de nuestra ajetreada vida para sentarnos y charlar un poco.

Hay, claro está, personas, políticos, gobernantes… que no quieren que hablemos, sospecho que, de trascender esto, ya estarían preparando ellos un nuevo evento para el mismo día para dejar esta iniciativa en segundo plano o manipulando cualquier información que tuvieran en mano con tal que no se llevara a cabo.

¿POR QUÉ?

Porque mientras se pueda utilizar la fuerza, las mentiras, el abuso de poder… ¿Para qué el diálogo?

Sin embargo, las palabras siempre conservarán su poder, las palabras hacen posible que algo tome significado y, si se escuchan, enuncian la verdad y, la verdad es que en este mundo algo va muy mal, ¿no? Crueldad e injusticia, intolerancia y opresión.

Antes teníais libertad para objetar, para pensar y decir lo que pensabais, ahora, tenéis censores y sistemas de vigilancia que os coartan para que os conforméis y os convirtáis en sumisos.

¿Cómo ha podido ocurrir? ¿Quién es el culpable?

Bueno, ciertamente, unos son más responsables que otros y tendrían que rendir cuentas, pero la verdad sea dicha, si estáis buscando un culpable sólo tenéis que miraros al espejo.

Sé por qué lo hicisteis, sé que teníais miedo. ¿Y quién no?

Guerras, terror, enfermedades, había una plaga de problemas que conspiraron para corromper vuestros sentidos y sorberos el sentido común, el temor, pudo con vosotros y, presas del pánico, acudisteis a los actuales líderes y creísteis sus mentiras.

Os prometieron orden, os prometieron paz y, todo cuanto se os pidió a cambio fue vuestra silenciosa y obediente sumisión.

Tenéis que poner fin a ese silencio, tenéis que haceros oír para recordad a este mundo lo que ha olvidado. Justicia, igualdad y libertad son algo más que palabras, ¡son  metas alcanzables!

Así que si no abrís los ojos, si seguís ajenos a los crímenes de estos gobiernos, entonces os sugiero que permitáis que el 11 de Julio del 2011 pase sin pena ni gloria, pero si veis lo que yo veo, si sentís lo que yo siento y si perseguís lo que yo persigo, entonces, os pido que os unáis a mí, dentro de un año, ante las puertas de los ayuntamientos y, juntos, les haremos vivir un 11 de Julio que jamás, JAMÁS nadie olvidará.»

Hagamos que ese día, sea nuestro día. Démosle un nuevo significado.

Y recordad; El pueblo no debe temer a los gobernantes, los gobernantes deben de temer al pueblo.

Ese día, si nada me lo impide, ahí  estaré, aunque sea solo pare recordar que una vez pensé que una locura así podía llegar a ser posible.